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El juez Santiago Pedraz, titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, concluyó en esta primera semana del mes de junio la toma de declaración de los 17 investigados en la presunta macroestafa llevada a cabo por Herrero Brigantina, cuya sede principal estaba ubicada en Ponferrada.
De esos 17 investigados, uno de ellos, S.López, volverá a declarar ya que en su primera comparecencia ante el juez Pedraz pidió posponerla hasta que sus abogados pudieran analizar los «miles de documentos» que recibió solo un día antes de su primera declaración y que forman parte de la causa.
De este modo, dichas declaraciones comenzaron en el mes de febrero y, por diferentes razones, se han ido dilatando en el tiempo. Cabe recordar que Juan González Herrero y su mujer, Kelly Johana Galeano, principales cabecillas de esta supuesta trama, iban a ser los primeros en comparecer ante el juez Pedraz pero no fue así y cuando lo hicieron negaron todos los hechos por los que se les investiga, que son presuntos delitos de estafa continuada, apropiación indebida, insolvencia punible, pertenencia a organización criminal, administración desleal y falsedad documental.
Así, este mismo martes prestó declaración una de las últimas investigadas, M.Dieguez que, según explicó Juan Manuel Prego, socio del Bufete Ortiz Abogados, contestó a todas las partes, incluidas las de las cinco acusaciones particulares, asegurando que «ella llevaba cuestiones de Recursos Humanos, que no tenía capacidad de gestionar cuentas y que tuvo el cese porque ya empezó a ver cosas extrañas».
A su vez, aseguró que sus funciones en la empresa eran relativas a «selección de personal según el perfil de comerciales del sector asegurador, el control de absentismo y el control de desarrollo normal de las actividades laborales de los comerciales y que a ella al final se le quedó debiendo un dinero y que no tenía capacidad de decisión de ninguna clase ni tenía acceso a cuentas ni nada de nada».
También señaló, respondiendo a las diferentes preguntas, que aunque formara parte del Consejo de Administración «no tenía ni voz ni voto, que allí quien mandaba era obviamente Juan González Herrero y todo el núcleo duro de Herrero Brigantina», añadió el letrado que forma parte de una de las cinco acusaciones particulares que representa a cientos de afectados por esta macroestafa.
Así, a falta de que S.López vuelva a comparecer, el proceso continuará con las de los representantes legales de las diferentes sociedades mercantiles que forman parte del entramado, entre ellas Herrero Brigantina S.A., North Atlantic Insurance Broker Company S.A., North Atlantic Insurance Broker Servicios Crediticios S.A. o Herrero Brigantina Servicios Crediticios S.A..
«Eso lo señalaron en su día pero al no corresponder los responsables, los Consejos de Administración con los representantes de las mercantiles, había que hacer primero una labor de identificación y entonces lo que quedaría pendiente sería básicamente eso», apuntó Juan Manuel Prego.
Así, las acusaciones particulares de los miles de afectados por esta supuesta macroestafa continúan a la espera de que la Fiscalía solicite medidas cautelares para los principales investigados.
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